Una vez más, gracias Kanouté (2-3)

El post que estoy redactando trata sobre la crónica del partido que el Sevilla FC ha disputado hace apenas unos minutos en Anoeta y que ha logrado vencer por 2-3.

Pero si un futbolista ha vuelto a brillar hoy por encima de todos, ese es el gigante de Mali, Frederic Kanouté. No me cansaré, como sevillista, de darles las gracias por cada partido que disputa con nuestra camiseta y por las exhibiciones que hace sobre el terreno de juego. El de hoy, tan sólo fue uno más de los cientos y cientos de partidos donde ha demostrado su valía, su tesón y su profesionalidad. En la mediapunta, en el centro del campo, en la punta de ataque, da igual donde juegue. Todo lo hace bien.

Por suerte o por desgracia, tiene 33 años. Por suerte digo, porque de haber nacido cuatro años después, haría ya muchas temporadas que no estaría en nuestras filas. Por desgracia decía, porque no es eterno, pero yo pienso seguir disfrutándo de él una y otra vez, mientras tenga cuerda para rato. Termina contrato en junio de 2012 (a finales de la próxima temporada), pero creo que ya voy tarde pidiendo un homenaje, un busto suyo o una estatua del malí en el Ramón Sánchez Pizjuán. 

Yo no vi jugar a Campanal, Arza, Bertoni, Pepillo, y un largo etcétera de buenos futbolistas que dicen que pasaron por Nervión, pero lo que si puedo asegurar es que al mejor futbolista que he visto con nuestra camiseta, por delante de Davor Suker y Jesús Navas, se llama Frederic Omar Kanouté. Y encima hoy logró un doblete, entre otras cosas.

Con Fernando Navarro, por méritos propios, seré bastante más breve, creo que ya está todo dicho. 

Creo que era más que justo volverle a dar las gracias a Kanouté, una vez más y las que nos quedan hasta que cuelgue las botas en el mundo del fútbol.

Anoche, Kanouté, junto a los hombres de pegada que tiene el Sevilla arriba, fue capaz de tapara las graves carencias defensivas de un equipo que volvió a encajar por enésima vez en lo que va de temporada, la friolera de dos goles en un partido, amén de las ocasiones que dispusieron los jugadores del equipo vasco en las que remataban con claridad y demasiada facilidad.

Un equipo que pretende estar en la zona noble de la tabla, no puede permitirse el lujo de encajar los dos tantos de ayer, muy especialmente el segundo de ellos, porque lo que parecía que iba a ser una jugada de ataque en el vértice del área rival, se transformó en un apérdida de balón absurda, un pelotazo y gol en contra desde unos 30 metros. Cuanto menos, digno de estudio lo de este Sevilla FC en tareas defensivas.