Repaso monumental de Marcelo a Marcelino (1-2)

Por muy ultra que uno pueda ser en esto del fútbol, creo que a nadie se le escapa el soberbio y monumental repaso que le ha dado el Athletic de Bilbao del "cuerdo" Bielsa a un flojísimo Sevilla FC de Marcelino, en su propio estadio, y que jamás supo ponerse a la altura del buen conjunto vasco. Durante la segunda mitad, he dudado en muchos instantes del encuentro, si el partido se estaba disputando en la catedral de San Mamés o en el Ramón Sánchez Pizjuán.

Un rival que jamás tendrá un final de partido tan tranquilo como en el día de hoy, ya que el Sevilla F.C. fue incapaz de crear peligro en la segunda mitad y casi en ningún momento del partido. Es más, costaba ver de pie a los hombres de Marcelino, ya que carecían de fuelle, ideas y fuerzas necesarias para plantarle cara a los leones.

Conceptos como saber a lo que se juega, rasear el balón, triangular, tener movilidad sin balón, posesión del mismo, presión del colectivo, estado de forma, ritmo de juego, intensidad, apoyar a un compañero que lo necesita y querer ganar el partido en todo momento, son una muestra de la diferencia abismal de conceptos que experimentaron ambos conjuntos en el día de hoy cuando se vieron las caras.

También se podría decir que el equipo de Bielsa está en alza, mientras que el de Marcelino parece un efecto gaseosa que no se sabe muy bien por donde deambula ni a donde pretende llegar.

No me considero para nada ventajista, pero para los resultadistas, esos que se quejaban cuando se denostaban desde este blog señales preocupantes en cuanto a juego ante Real Sociedad, Sporting, Racing, Osasuna o Granada, no sé como podrán justificar esta derrota de hoy, así como la acumulación de cinco jornadas sin ganar en un calendario que, a priori, era más que favorable para los de Nervión.

No basta con decir que el Sevilla FC sigue ocupando puestos europeos, cosa que es un dato objetivo, sino  que también acumula cinco jornadas sin ganar, pero me preocupa y mucho la pinta que tiene "el enfermo" que aspira a quedar tercero o cuarto según se nos ha vendido a bombo y platillo desde el club. Un equipo eliminado en competición UEFA en la eliminatoria previa, y que no da síntoma alguno de tener constantes vitales que inviten a la recuperación inmediata.

No intento transmitir pesimismo, aunque mi estado anímico así lo presienta, pero mucho, mucho, mucho deben de cambiar las cosas si pretendemos presenciar fútbol en Nervión. Para empezar, digo yo, la pelota debería circular por el centro del campo, dato éste que hace muchísimo que no presenciamos.

Por cierto, ¿vieron ustedes hoy el partidazo que se marcó el "internacional" Toquero en la era Caparrós? ¡Ah, bueno, que sólo ha entrado al final, sustituyendo a Llorente para perder tiempo! Ha quedado muy clarito que, los "troncos" vascos, esos que dan patadones al balón y patadas al esférico, muevan la pelota un rato. Hay jugadores como Ánder Herrera o Muniaín que explotan sus cualidades al cien por cien, porque así lo consigue su técnico. También ha quedado puesto de manifiesto que este conjunto no se parece en absoluto para nada al que entrenaba el bueno de Joaquín Caparrós, por lo que queda más que patente, que un buen técnico es capaz de armar a un equipo, a su imagen y semejanza, utilizando a los mejores jugadores, aunque no se asemejen a la idiosincracia vasca

¿No tiene este Sevilla FC jugadores de talento como Navas, Perotti, Campaña, Rakitic y compañía que puedan toserles a los Herrera y Muniaín? Yo pienso que sí, lo que se sucede, desde la "envidia sana", es que un técnico explota las cualidades de sus futbolistas mientras que el otro no. Así de clarito y de tajante.

Y yo me pregunto, ¿ha conseguido Marcelino ya lo que pretendía, o lo mejor está aún por llegar? Miedo me da, pensar de que hemos tocado techo con el asturiano. Paciencia, trabajo y refuerzos, amén de los resultados, necesita d emanera urgente este equipo si quiere terminar peleando con Valencia o Bilbao, por citar a los equipos de nuestra liga que están más en forma en este momento.