Supongo que los que entráis por aquí a menudo lo hacéis para buscar noticias relacionadas con el equipo de nuestra pasión y sentimiento, como es el Sevilla FC. Más aún en las fechas en la que nos encontramos y con las numerosas y movidas operaciones de salida de jugadores y de llegada de refuerzos que se presuponen en la delicada situación deportiva en la que se encuentra un Sevilla venido a menos. En otras ocasiones, supongo que entráis a leer los sentimientos y pareceres de un aficionado sevillista más, como vosotros, que expresa su opinión de lo que percibe del equipo de sus amores.
Pero no podemos olvidar que los blogueros y yo no soy ninguna excepción, a veces, mejor dicho, siempre, también somos seres humanos y tenemos nuestro corazoncito independiente del mundo del balón. Es por ello que, en el último post del año, me gustaría despedir este agridulce año 2012 desde una faceta alejada del fútbol y de una manera más original que otros años, es decir, desde el lado humano y personal y no futbolero.
Este año que hoy toca a su fin y que a tantas personas ha privado de realizar su labor profesional o los ha dejado completamente desahuciados, me recibió con una inesperada y repentina operación debido a una infección que se complicó más de lo debido. Durante el período estival de vacaciones, cuando más tranquilo y relajado se encuentra uno, la vida, esa compañera que a veces te abofetea y pisotea sin darte explicaciones, estuvo a punto de llevarse a la mujer más querida por cualquier ser humano. Y como suele pasar con estas cosas, fue sin avisar. Durante los meses que estuvo en la UCI apeló a los lemas sevillistas"Dicen que nunca se rinde" y "Casta y Coraje" para lograr salir de tan delicada situación. Hoy día, ya se encuentra en casa y continua con el largo período de rehabilitación que tiene por delante. Afortunadamente las cosas han cambiado y por estas señaladas fechas, podemos presumir de que la tenemos entre nosotros durante muchos años más.
Pero como la mayoría de las veces la vida te permite disfrutar y sonreir, nos trajo la esperada noticia del nacimiento de mi sobrina, de nombre Cristina. Una sevillista más, no lo dudéis. Tanto por una parte de la familia como por la otra, el rojo y blanco son los colores que predominan y que unen Dos Hermanas con Sanlúcar la Mayor. Ella, que está para comérsela, junto con la recuperación de mi madre, han venido a traer el esperado punto de inflexión necesario en un año que ha sido muy duro en el aspecto personal.
Sólo pido al Año Entrante, a ese 2013 (del que los supersticiosos califican de mala suerte), que mantengan la Armonía, la Paz, la Felicidad, la Salud y el Amor que existe en la familia. Además, como no se trata de pedir cosas materiales, le pido al Año Nuevo que no asfixie más a tantas y tantas familias que lo están pasando muy mal sin su puesto de trabajo y/o sin sus viviendas.
Desde mi lado humano, más que del sevillista, tan sólo puedo desearos que todos vuestros deseos se cumplan y que el Año Nuevo os colme y os recompense tal como lo merecéis en la faceta personal.
Ya habrá tiempo de hablar de fútbol. Nos vemos el año que viene.
¡Feliz Año Nuevo, sevillistas!
1 comentario:
Igualmente hermano y cuida de esa persona que tienes en casa rehabilitandose y de esa pequeña que teneis el encargo de que sepa solo respirar en blanco y rojo,un abrazo Julián y feliz año 2013,desde mi corazón te lo deseo a ti y a tu familia con todas mis fuerzas,lo dicho,mi brindis de esta noche irá por todos vosotros,mis hermanos sevillistas,al menos uno de ellos,que brindar pienso hacerlo unas cuantas de veces,hasta caer en manos de don morfeo.
Publicar un comentario