El Sevilla FC cosechó en la tarde del domingo un valioso empate en el Calderón, si atendemos sobre todo, que enfrente estaba un buen rival que parece haberse rearmado tras las marchas de De Gea, Forlan y Agüero.
Empate valioso, dado que hemos jugado ante los cuatro rivales que se presume que tendremos a priori para conseguir plaza europea (Málaga, Villarreal, Valencia y At.Madrid), habiendo permanecido invictos en los cuatro enfrentamientos.
Se confirma que la fortaleza defensiva del equipo va a más, no siendo necesaria la presencia de Alexis y/o Fazio (por si quedaba alguna duda), y teniendo un portero bajo palos que está en el momento más dulce de su carrera deportiva, habiendo logrado la titularidad por méritos propios.
Ahora bien, si observamos un poco más a fondo lo que dio de sí el partido, me queda la sensación de haber desperdiciado los primeros cuarenta y cinco minutos, donde estuvimos a merced del equipo colchonero y en ningún momento pudimos superar la línea divisoria de ambos terrenos de juego. ¿Faltó ambición? ¿Faltó calidad para llegar al campo contrario? ¿Hubo miedo o incredulidad de que podíamos conseguir traernos algo más desde Madrid? No lo sé, la verdad, pero mi equipo en la primera mitad no me gustó. No me dijo nada, sólo le salvó el resultado, ya que encima, medio conjunto entró con cartulina amarilla al vestuario.
Ya en la segunda mitad fue una auténtica lástima que Manu del Moral no definiera nuevamente en un mano a mano con el meta rival. Es una pena que el sinónimo de gol en nuestro Sevilla FC se llame Kanouté o Negredo. Una pena porque son pocos los jugadores fiables que pueden ganar un partido. Una alegría que al menos tengamos dos cracks de la definición.
Pudimos perder, si no lo evita Javi Varas, pero pudimos ganar si definimos alguna de las pocas ocasiones de las que dispusimos. Ganamos en solidez defensiva y por contra perdemos en creatividad. Ganamos en trabajo de equipo, mientras que vamos perdiendo vistosidad en individualidades.
Lo que sí es cierto (datos objetivos e imagen aparte), es que de los seis encuentros disputados, cuatro de ellos han sido con los rivales de arriba, a excepción de los dos grandes, y en ninguno de ellos hemos salido derrotados, incluido el desplazamiento al fatídico El Sadar. Me gustaría ver a un equipo más vistoso en el trato con el balón, claro que sí, pero los que entienden de esto dicen que un equipo se empieza construyendo desde atrás y en ello anda Marcelino, donde su equipo tan sólo ha encajado tres tantos en seis encuentros, dejando a cero la portería en los últimos cuatro partidos. Queda mucho camino por recorrer aún, pero el inicio al menos, parece esperanzador.
Lo que sí es cierto (datos objetivos e imagen aparte), es que de los seis encuentros disputados, cuatro de ellos han sido con los rivales de arriba, a excepción de los dos grandes, y en ninguno de ellos hemos salido derrotados, incluido el desplazamiento al fatídico El Sadar. Me gustaría ver a un equipo más vistoso en el trato con el balón, claro que sí, pero los que entienden de esto dicen que un equipo se empieza construyendo desde atrás y en ello anda Marcelino, donde su equipo tan sólo ha encajado tres tantos en seis encuentros, dejando a cero la portería en los últimos cuatro partidos. Queda mucho camino por recorrer aún, pero el inicio al menos, parece esperanzador.
Por cierto, ¿a alguno de vosotros os resultó llamativo que Negredo entrase en los últimos quince minutos a medio gas? Yo es que pienso que el vallecano no estaba en condiciones físicas para saltar al césped. Dios quiera que nos respeten las lesiones, porque si nos atenemos al banquillo del día de ayer, hay que pensárselo dos y tres veces para realizar un cambio. Y a toro pasado, menos mal que caímos eliminados en la Europa League. Digo a toro pasado, porque no me gustó para nada empezar la temporada con el fracaso europeo, pero a día de hoy, tenemos que darnos con un canto en los dientes al jugar cada siete días.
2 comentarios:
Es cierto que la fortaleza defensiva del equipo va a más, pero ya es momento de potenciar el ataque. Se hace necesario más acierto de cara a la portería contraria.
De Negredo, le comentaba a mis hijos viendo el partido, que saltó a medio gas como dices con la idea en la cabeza de acudir hoy a la concentración de la selección. No está bien, pero puede pensar que si no está para el partido del viernes bien podría jugar el del martes.
Saludos.
ja, ja, ja....este marcelino es otro jimenez...viva el panadero de alcala..ese si que tiene calidad...
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