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martes, 15 de febrero de 2011

¡Siempre contigo, Sevilla!

Por encima de malas defensas, por encima de errores en la portería., muy por encima de centrocampistas mediocres. Superando con creces pésimos estilos de fútbol. Intentando dejar a un lado la horrorosa planificación deportiva. Procurando que las personas que están pasando penurias económicas no recuerden el precio de su carné de abonado. Omitiendo las declaraciones grandilocuentes y vacías de nuestro presidente.

Por encima de todo eso, y de más, como tu centenaria historia te ha demostrado, tienes un aval importantísimo, Sevilla, que no es otro que los soldados de a pie, tu bendita afición. Ésa que no te abandonó nunca en segunda división, la misma que ayudó a levantar el actual Ramón Sánchez Pizjuán aportando dinero a una "FILA CERO", la que no te abandonó aquel triste mes de agosto de 1995. Y la misma que comenzó a viajar con ilusión a Genselkirchen, a disfrutar de lo que nunca había vivido.

Una afición que, encima, ha tolerado que este año te baile cuál equipo chico que ha visitado nuestro estadio. Una afición, que ve de frente el fútbol que otros ven de espaldas. Una afición, que pese a sufrir humillaciones de equipos pequeños, hizo que todo un Real Madrid no pudiese llevarse un triunfo de aquí, si no llega a ser por Undiano Mallenco. Una afición, que es capaz de cantar un himno con 40.000 gargantas al unísono, recibiendo grabaciones de video y flashes de los ultras de las aficiones rivales.

Esta semana toca cita grande europea en Nervión. Otra más, como aquella remontada que siempre me cuenta mi padre contra el PAOK de Salónica en los años 80. Una más, como la de aquella tanda de penalties en Grecia, con Unzué en la portería y Diego Rodríguez lanzando la última pena máxima, también frente al PAOK de Salónica. Una noche muy similar a la que Davor Suker nos hizo saltar a más de uno en una prórroga disputada en Grecia. Aún no se me olvida la cara de felicidad que llevaba Rafa Paz mientras corría para abrazar al delantero croata.

Ya sé que viene el Oporto. Ya sé que no somos ni carne ni pescado. Ya sé que los portugueses arrasan en su liga con 18 victorias y dos empates, tras disputar 20 encuentros. Ya sé que llevamos tres partidos sin ganar en liga. Pero en circunstancias muy similares recibimos hace un par de meses a uno de los equipos de moda del viejo continente, el Borussia Dortmund, y ya sabemos como terminó la historia, pese a que se adelantaron nada más comenzar el choque. Y hace un mes también llegamos a eliminar en Copa del Rey al equipo de moda en España, al "submarino amarillo".

Sé que la misión es muy complicada. Sé que somos un auténtico desastre en la parte de atrás. Pero también soy consciente de que con Nervión a reventar, es muy complicado que cualquier equipo consiga vencer aquí. Paradojas de la vida, que diría aquel, ya que lo hicieron Málaga, Mallorca, Getafe y un largo etcétera.

Pero lo del jueves es una noche europea. Otra más, y ya pierde uno la cuenta. Y noche de las grandes. Y allí estaremos. Esperemos que sea para disfrutarlo. Que te diga lo que no me gusta de ti, Sevilla, o lo que modestamente pienso que te falta o que te sobra, Sevilla, no es óbice para que te siga diciendo que ¡¡¡siempre estaré contigo, Sevilla!!!. Hazlo por nosotros.