Cartas marcadas y boca arriba

A escasas veinticuatro horas para que se cierre el mercado de fichjaes, el Sevilla FC, salvo sorpresa mayúscula de ultimísima hora, tan sólo está pendiente de tres movimientos de jugadores, aunque uno ya se ha oficializado:

• Mahamadou Dabo ha sido traspasado sorpresiva y afortunadamente al Olimpique de Lyon por un montante de 1 millón fijo más 0,8 millones por incentivos variables, como reconoce la propia página web del club galo. Jugador malo y pésimo donde los haya en cuanto a calidad y prestaciones mínimas se refiere para jugar en la primera división del fútbol nacional, pese a la voluntad y empeño que pone en sus acciones. Un acierto el deshacerse de este buen profesional pero pésimo futbolista.

•  Para que el apartado de salidas se complete con una nota de sobresaliente, dado que este verano se ha conseguido colocar incluso a Arouna Koné, aunque se comparta su ficha con el Levante, aún falta por tramitarse la salida del pésimo profesional Ndri Romaric. Un futbolista pesado en exceso y que como habitúa con su lentitud en el terreno de juego, va a costar sudor y lágrimas el deshacerse de él. Parecía que los tiros apuntaban para Francia, pero según informa Manuel Miranda en el portal deportivo "Football Sevillano", el RCD. Español podría ser el nuevo destino del marfileño, que recalaría en la Ciudad Condal en calidad de cedido, donde los pericos y los sevillistas compartirían la ficha del centrocampista. De verdad que me cuesta creer no ver al "gordito" por Nervión la próxima temporada. Espero que no se frustre todo a última hora como ya ocurriera hace un año con el Zaragoza o hace un mes con los turcos del Bursaspor.

•  Y donde estamos pendientes la mayoría de los sevillistas es en la llegada de Giovani Dos Santos, única esperanza y necesaria para reforzar a la plantilla. A estas horas hay reunión en Londres entre los rectores del Tottenham y Jorge Mendes, representante del futbolista. Se comenta que el Sevilla FC habría cambiado las condiciones de la oferta, pasando de adquirir al mexicano como cedido con opción de compra a ofertar cuatro millones más uno por incentivos. Sea como fuere, "el capricho de Marcelino" se hace necesario pese a que hayamos caído eliminados de Europa, dado que ya hemos podido comprobar a las primeras de cambio que en la vanguardia, no andamos muy sobrados de efectivos.

No espero ningún movimiento de mercado más, ni siquiera las salidas de Bernardo, De Mul o Perotti. Pienso que los dos primeros seguirán en el plantel donde se presume que jugarán más bien poco o nada, a excepción de que nos atacase una plaga de lesiones, mientras que los cantos de sirena que parecían que apuntaban a la salida del argentino a la Juventus, quedaran para otra temporada. Por consiguiente, tampoco espero la llegada de ningún otro futbolista, ni la del deseado central de jerarquía que necesitamos, ni la llegada de otro delantero que sustituyese el hipotético fracaso en las negociaciones por Giovani.