Mordió cuando soltó el complejo (1-1)

Tan claro como lo resume el titular de esta entrada del blog. Vaya por delante que no pretendo quitarle mérito alguno a esa máquina de hacer fútbol y de recuperar balones que es el actual FC. Barcelona, pero hay cosas que no se deben omitir ni perdonar en el día de hoy, aunque enfrente se encuentre el mejor equipo del mundo.

El Sevilla FC salió acomplejado desde el momento en que Gregorio Manzano explicó la disposición táctica de los jugadores en la pizarra. Jesús Navas iba a jugar de extremo izquierdo. A partir de ahí sserá más fácil comprender todo lo que viene a continuación.

La misión del palaciego era defender en todo momento las constantes subidas de Dani Alves, amén del cuento que quiera vendernos Gregorio Manzano en la rueda de prensa posterior al encuentro y com palabras más bonitas. Y lo peor de todo es que esta película ya la he visto yo con Manolo Jiménez en el banquillo del Nou Camp. Y puse el grito en el cielo al igual que hago ahora con Manzano. Colocando a Jesús Navas en la izquierda, aprovechas su extraordinaria virtud del esfuerzo, sacrificio y físico superdotado que posee para ponerlo a correr detrás de Dani Alves. En cambio le quitas la verticalidad, profundidad y peligro que acarrea a su par cada vez que llega al banderín de córner. Y si en este partido lo hubiese conseguido alguna vez, además le obligas a centrar con la pierna izquierda, que si ya de por sí le cuesta sacar contínuos buenos centros con la diestra, imaginaros con la zurda.

El extremo de Los Palacios cumplía hace quince días 300 partidos oficiales con nuestro club. De todos ellos, y tirando de memoria a bote pronto, habrá jugado 296 de extremo derecho, dos de mediapunta y dos de extremo izquierdo, cuyo honor le corresponde a los entrenadores citados. Y digo yo que estas estadísticas se deberán a algo.

Además de la aberración cometida con Jesús Navas, Diego Capel (a pierna cambiada) se preocupaba más de defender a Adriano que de intentar "hacerle cosquillas" al de Couritiba. 

También nos vendía Manzano con su alineación inicial que iba a jugar con tres hombres por el centro: Zokora (qué lejos está del que llegó a Sevilla), Medel (qué bueno que vinistes) y Rakitic (clase e intermitencia). Pero la realidad distaba mucho de la imaginación del aficionado. Parecía que el Sevilla FC estaba jugando en ataque, en cuanto a disposición en el campo, con Kanouté y Luis Fabiano, con su típico 4-4-2. El croata Ivan Rakitic estaba liberado de defender, por lo que Medel y Zokora se tenían que multiplicar, en especial el chileno, para apagar los incendios que causaban por el centro Messi, Iniesta, Xabi y Busquets. Nuestros extremos estaban pendientes de sus laterales. Nuestro hombre de enganche ni estaba ni sabía donde estaba. Además, como el solitario Negredo no podía alcanzar los misiles que le lanzaban, pues el balón era una y otra vez del Barcelona sin que pudiésemos salir del centro del campo.

Era cuestión de tiempo el recibir el gol culé. Habíamos hipotecado el partido a una posible falta lateral o córner o a un contaataque que no tenía pinta alguna de que se fuese a producir. la primera falta con peligro que botamos en las inmediaciones del área barcelonista, se produjo en el minuto 24, en la que, por cierto, se pidió penalty a Zokora.

Y como era cuestión de tiempo, Dani Alves ganó la espaldas de Jesús Navas y Fernando Navarro, para que Bojan pusiese en ventaja a los suyos. El Sevilla FC continuaba sin rebasar la medular y Messi pudo ampliar l aventaja con un cabezazo al larguero.

Mi hermano me decía en la grada, durante la primera mitad, que para lo que estaba haciendo Zokora tanto en la destrucción como en la elaboración, y encima con una absurda cartulina amarilla en su haber, que para ello retrasáramos a Rakitic y que Kanouté ocupara su puesto. Lo que veía un aficionado es lo que hizo el de Bailén en el descanso.

Y ta-ta-ta-chán, el Sevilla FC cambió en actitud en cuanto a ir a buscar al FC. Barcelona para presionar y robarles el balón, cosa que no sucedía en la primera mitad cuando acumulábamos jugadores en nuestro área y los rivales, entre ellos Xavi e Iniesta tenían una distancia mínima de dos metros para pensar que podían hacer con el balón.

Y a los tres minutos en una buena combinación entre Rakitic, Kanouté y Negredo, el vallecano se planta ante Valdés, que le cierra el hueco, pero el delantero, cayéndose, consigue sacar un centro con su pierna derecha que cabecea Jesús Navas a la red (1-1).

Y la volvió a tener Negredo que se plantó sólo ante Valdés cinco minutos después.

Y el Sevilla FC, que es inferior al FC. Barcelona hoy por hoy, cumplía en esta segunda mitad su papel a la perfección. En un estadio a reventar y ante los suyos, hacía lo único que le pedimos los aficionados, que no es otra cosa que poner sobre el verde a los once mejores jugadores, echarle dosis de actitud e INTENTAR hincarle el diente a los grandes. Y punto. 

Esa receta tan sencilla la omitió Gregorio Manzano en la primera mitad, como si todavía entrenase a Mallorca, Rayo, Valladolid o Málaga. Se ve que alguien debió recordarle en el descanso que hoy por hoy, entrena a un equipo que lucha por obtener clasificación europea.

Y a diez minutos del final tuvo Jesús Navas la mejor y más clara ocasión para los nuestros, en un contraataque de tiralíneas iniciado por Negredo, continuado por Perotti y que Valdés desbarató con su pie derecho cuando parecía que el 2-1 iba a subir al marcador.

También pudieron ganar los culés, con disparo de Iniesta a la madera y con dos balones (es cierto, Alfredo) que sacó Gary Medel en la línea de gol, el segundo de ellos en el último minuto de partido.

En la segunda mitad, vibrante a más no poder, todo hay que decirlo, pudo ganar cualquiera de los dos equipos, por lo que a tenor del resultado puede considerarse justo el empate y bueno el punto.

Un punto que habrá que hacer bueno el próximo domingo en Valencia, donde recuperamos a Escudé y perdemos por sanción a Martín Cáceres y a Fernando Navarro.

Y un par de apuntes para terminar: 

1.- ¿Alguien duda de lo bueno que es Messi?. Por favor, pero si es que parece un auténtico jugador de play-station con el balón en los pies. Qué alegría da ver a este tipo de futbolistas sobre un terreno de juego.

2.- En el descanso del partido, en el concurso de "La jornada de tu vida" del grupo BBVA hemos tenido la oportunidad de presenciar a una persona que se lesiona más rápido que Fede Fazio, jejeje. Me refiero al primer lanzador, que se ha retirado con un tirón muscular en el cuádriceps. Ver para creer.